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La Clínica
Dolor de espalda: causas, síntomas y tratamientos

Publicado por Enrique Galindo Andújar el enero 31, 2025

El dolor de espalda es una de las afecciones más comunes en la población, afectando a personas de todas las edades. Dentro de este problema, la lumbalgia es la causa más frecuente de consulta médica relacionada con la columna vertebral. Este dolor puede variar en intensidad y duración, y en algunos casos puede llegar a ser incapacitante. En este artículo, analizaremos sus principales causas, síntomas y los tratamientos más efectivos para aliviarlo.

¿Qué es la lumbalgia y en qué se diferencia del lumbago?

La lumbalgia es el dolor localizado en la parte baja de la espalda, específicamente en la zona lumbar. Puede ser aguda, si dura menos de seis semanas, o crónica, si se prolonga por más tiempo. Con frecuencia, este dolor se asocia a esfuerzos físicos excesivos o posturas inadecuadas, aunque también puede deberse a afecciones subyacentes.

Por otro lado, el lumbago es un término que se usa con más frecuencia cuando el dolor aparece de manera repentina, muchas veces a raíz de un mal movimiento o un esfuerzo excesivo. Ambos términos suelen utilizarse indistintamente, pero en general, la lumbalgia hace referencia al dolor lumbar en términos más generales, mientras que el lumbago se asocia a episodios agudos e incapacitantes.

Causas del dolor lumbar

El dolor lumbar puede estar originado por múltiples factores, desde lesiones musculares hasta enfermedades degenerativas de la columna. Identificar la causa es clave para aplicar el tratamiento adecuado y evitar recaídas.

1. Problemas musculares o ligamentarios

Los esfuerzos excesivos, malas posturas o levantar objetos pesados sin la técnica adecuada pueden provocar distensiones musculares o desgarros en los ligamentos de la espalda, causando un dolor agudo y limitación en el movimiento.

2. Hernia discal

Los discos intervertebrales pueden desplazarse o romperse, ejerciendo presión sobre los nervios cercanos y generando dolor lumbar intenso. En estos casos, es común que el dolor se irradie hacia una pierna, lo que se conoce como lumbociática, provocando molestias persistentes y alteraciones en la movilidad. En algunos casos, puede ser necesario realizar una resonancia magnética para evaluar la afectación de los discos.

3. Artrosis o desgaste de las articulaciones

El envejecimiento y el desgaste progresivo de las articulaciones pueden causar dolor crónico en la parte baja de la espalda. Esta condición afecta la flexibilidad de la columna y puede generar rigidez y molestias constantes. En situaciones avanzadas, puede requerirse una intervención como la cirugía traumatológica para mejorar la calidad de vida del paciente.

4. Escoliosis y otras alteraciones de la columna

Las deformidades en la columna vertebral, como la escoliosis o la espondilolistesis, pueden generar dolor lumbar crónico debido a la desalineación de la columna y la sobrecarga en ciertas áreas.

5. Factores psicológicos y estrés

El estrés y la ansiedad pueden generar tensión en los músculos de la espalda, agravando el dolor lumbar. En algunos casos, el dolor lumbar puede ser de origen psicosomático, sin una causa física evidente, pero con impacto real en la calidad de vida del paciente.

Tipos de lumbalgia

La lumbalgia puede clasificarse en diferentes tipos según su origen, duración y características. Comprender estas diferencias es fundamental para encontrar el tratamiento más adecuado.

  • Lumbalgia mecánica: El dolor empeora con el movimiento y mejora con el reposo. Puede ser causada por sobrecargas musculares, malas posturas o lesiones en los discos intervertebrales.
  • Lumbalgia no mecánica: El dolor no varía con la actividad física y puede estar asociado a causas inflamatorias, infecciones o enfermedades sistémicas.
  • Lumbalgia crónica: Dura más de 30 días y puede ser intermitente o persistente. Suele empeorar con ciertas posturas o después de estar mucho tiempo de pie o sentado.
  • Lumbociática: Se produce cuando el dolor lumbar se irradia hacia una pierna debido a la compresión del nervio ciático, lo que puede generar sensación de hormigueo o debilidad.
  • Lumbalgia emocional: Cuando no hay una causa física clara, pero el dolor persiste debido a factores emocionales como estrés, ansiedad o depresión, afectando la percepción del dolor.

Síntomas de la lumbalgia

Los síntomas de la lumbalgia pueden variar según la causa, pero en general incluyen dolor localizado en la zona lumbar y dificultad para moverse. En casos más severos, el dolor puede irradiarse a otras partes del cuerpo.

  • Dolor localizado en la parte baja de la espalda.
  • Rigidez o dificultad para moverse.
  • Sensación de debilidad en la zona lumbar.
  • Dolor que se irradia a las piernas (cuando hay afectación nerviosa, como en la ciática).
  • Espasmos musculares o dolor al palpar la zona lumbar.
  • Sensación de hormigueo o ardor en casos de compresión nerviosa.

Tratamientos para el dolor lumbar

El tratamiento del dolor lumbar depende de la causa y la gravedad del problema. En la mayoría de los casos, se combinan medidas conservadoras con terapias más avanzadas para aliviar los síntomas y prevenir recaídas.

Reposo relativo y cambios posturales

Evitar el sedentarismo prolongado y mejorar la postura puede ser clave para aliviar el dolor lumbar, permitiendo la recuperación sin afectar la actividad diaria.

Aplicación de calor o frío

El calor ayuda a relajar los músculos, mientras que el frío reduce la inflamación en casos de lesiones recientes, contribuyendo a una recuperación más rápida.

Medicación

Los analgésicos y antiinflamatorios, como el ibuprofeno o el paracetamol, pueden ayudar a reducir el dolor y la inflamación, mejorando la movilidad.

Fisioterapia y ejercicios

El fortalecimiento de la musculatura lumbar mediante ejercicios específicos y sesiones de fisioterapia pueden mejorar notablemente la condición. Se recomienda especialmente ejercicios de estiramiento y fortalecimiento del core.

Tratamientos avanzados

En casos graves, pueden considerarse opciones como la infiltración de corticoides, la radiofrecuencia o, en última instancia, la cirugía, especialmente cuando hay compresión nerviosa severa.

Prevención y hábitos saludables

Adoptar hábitos como mantener un peso adecuado, realizar ejercicios de fortalecimiento lumbar y evitar el estrés puede prevenir futuros episodios de lumbalgia, asegurando una mejor calidad de vida.

¿Cómo prevenir el dolor lumbar?

Para reducir el riesgo de padecer lumbalgia, es recomendable adoptar hábitos que fortalezcan la columna y minimicen los factores de riesgo. Entre ellos:

  • Mantener una postura correcta, especialmente si se pasa muchas horas sentado o de pie.
  • Realizar ejercicio regularmente, enfocándose en fortalecer la musculatura lumbar y abdominal.
  • Evitar cargar peso de forma incorrecta: flexionar las rodillas y mantener la espalda recta al levantar objetos pesados.
  • Seguir una alimentación saludable para evitar el sobrepeso y la inflamación.
  • Reducir el estrés con técnicas de relajación como el yoga o la meditación.

¿Cuándo consultar a un especialista?

Si el dolor lumbar es persistente, se irradia a las piernas, se acompaña de pérdida de fuerza o afecta las actividades diarias, es fundamental acudir a un especialista en traumatología para un diagnóstico preciso y un tratamiento adecuado.

En nuestra clínica IMTRA, contamos con especialistas en columna vertebral y traumatología, listos para ayudarte a aliviar el dolor de espalda y mejorar tu calidad de vida. ¡Consulta con nosotros y encuentra la solución que necesitas!


Licenciado en Medicina por la Universidad Complutense de Madrid, donde también se especializó en Medicina Legal, Medicina del Trabajo y Cirugía Ortopédica y Traumatología. Obtuvo su doctorado con una tesis sobre sinovitis crónica hemofílica de rodilla, calificada Cum Laude. En su trayectoria profesional, ha sido Jefe de Sección en Cirugía Ortopédica del C.S. La Paz y ha dirigido servicios de urgencias traumatológicas en varias clínicas. Actualmente, es Jefe de Servicio de Traumatología en el Hospital Moncloa y Director Médico del Instituto Madrileño de Traumatología.
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